Ju se fue temprano. Cuando me desperté salí a caminar –hacía calor, un calor húmedo y pesado y no tuve ganas de correr- pero me bañé mil veces. El agua estaba espectacular, fresca, salada, transparente. No daban ganas de salir. Caminé, me bañé, caminé, me bañé, caminé, me bañé y saqué fotos. Me vine a casa a trabajar. Regué, hice higos en almíbar, lavé la cocina. Actualicé el autorretrato. No hice nada más en la compu. No escribí. Las interrupciones me matan.
Etiquetas: febrero
Suscribirse a
Entradas [Atom]